No obstante, el carácter yang y yin de uno y otro reviste ciertas particularidades.
Si bien lo encuadramos dentro de los órganos yin, el Bazo tiene rasgos yang—controla el ascenso, ama la sequedad—; mientras que el Estómago, aun siendo un órgano yang, posee muchos aspectos yin—controla el descenso, detesta la sequedad.
Como siempre, esto se refleja en la patología.
El Estómago se verá especialmente afectado por síndromes relacionados con la falta de líquidos, mientras que el Bazo será muy sensible al exceso de humedad o yin en el organismo, y tenderá a sufrir trastornos de vacío de qi o de yang que afectarán sobre todo a su función de transporte y transformación de los líquidos.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Si necesitas ponerte en contacto con nosotros...
Utiliza nuestra dirección de correo electrónico, porque este formulario de comentarios No funciona.
Puedes escribirnos aquí: 1er.lobogris@gmail.com
Gracias