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lunes, 18 de marzo de 2024

La Importancia de las Palabras

14 idiomas provienen del LATÍN, pero solo UNO creó un imperio de tres siglos del cual son herederos los países de Hispanoamérica. El argumento de que “Latinoamérica” es correcto porque el español proviene del latín, es absurdo.

Latín significa literalmente “del Lacio” región central de la península Itálica. Y la llamada Cultura Latina es la del Imperio Romano. Un español es latino pero un colombiano no lo es. El término fue inventado por los franceses para incluirse en América y eliminar el prefijo “hispano”.

Como siempre la importancia de las palabras. Ibero, de Iberia; latino, de Lacio; rumano, de Rumanía. Sueños de usarlo porque es absolutamente ridículo, injusto e inapropiado llamar “italiano” a todo lo hispanoamericano o iberoamericano.

Fue una imposición globalista francesa aceptada con entusiasmo por Italia, y regada por Inglaterra, todos ellos enemigos racistas de todo lo hispano empeñados en alentar la Leyenda Negra que es parte de NOM (Normas Oficiales Mexicanas).

Esta flecha puede que le haya dado a usted.
Un aullido

Autor - Fernando López Mirones

sábado, 9 de marzo de 2024

Hispanidad de Blas Piñar

Uno de los especímenes más característicos del régimen vigente en España estas últimas décadas es aquella figura pública —principalmente político o periodista— que, a la manera de quien se asoma a la ventana cada mañana para decidir qué ropa ponerse, echa un vistazo al entorno para ver quién manda o qué opinión es mayoritaria y entonces decide qué convicciones defender. Ahí tenemos por ejemplo a aquel falangista que lloró la muerte de Franco desde las páginas de Arriba, luego le escribió a Suárez el discurso «Puedo prometer y prometo» y más adelante encontró siempre ocasión de reconocer los incuestionables méritos de cada sucesivo ocupante de La Moncloa. Lo último que recuerda servidor de él es un discurso en la radio ardientemente feminista, doctrina que no parecía preocuparle décadas antes, pero ahora sí. Hace poco se retiró, sumando múltiples premios de reconocimiento a su trayectoria periodística y dejando a dos hijas bien colocadas en los medios. Puro R-78.



En tal contexto de hombres carentes de columna vertebral, esponjosos, suavitos, vacíos por dentro, que miran a la cámara sosteniendo con aplomo lo que toque decir ese día y que probablemente será opuesto a lo de ayer o a lo de mañana, una figura con tantas aristas como la de Blas Piñar resulta incomprensible para muchos, ¡con todo lo español que era, aún les parecerá un extraterrestre! Fue alguien de marcadísima personalidad que defendió a lo largo de toda su vida con vehemencia, constancia y una brillantez oratoria portentosa unas convicciones que podríamos resumir, usando sus palabras, en dos fundamentales: la cruz y la bandera. El catolicismo y el patriotismo español. Enarboló en público lo que pensaba, aunque eso le costase el escarnio y la destitución durante el franquismo —como luego veremos— y con la misma firmeza en los años posteriores votó con presciente lucidez y en solitario contra los Estatutos de Autonomía en su paso por el Congreso; igualmente, criticó la naciente Constitución en su fundamento antinacional que entonces nadie quiso ver, así como ciertos aspectos de la modernidad (cuando aún no existía la palabra «woke»). En todo ello el tiempo ha terminado por darle la razón.

Pero tiene aristas, decíamos, pues un mismo atributo puede ser una virtud o un defecto según la situación. No negaremos que a veces escuchando o leyéndole ciertos discursos nos resulte obstinado e intransigente hasta parecer antipático. La vida también consiste en adaptarse a los demás, aprender y examinar críticamente el propio comportamiento e ideas... Su visión de la Guerra Civil, por ejemplo, como una cruzada rebosante de épica y heroísmo, cuando el enemigo allí no dejaron de ser otros españoles, la mitad de la nación, no es lo que uno esperaría desde una perspectiva realmente patriótica (ahora es la izquierda la que fantasea con aquel cruel enfrentamiento fratricida, aspirando a ganarlo retroactivamente). Aunque lo juzgaríamos un tanto a la ligera si ignorásemos su biografía, puesto que su padre, militar, fue parte de los resistentes dentro del Alcázar de Toledo, mientras que a él la guerra lo sorprendió en Madrid estudiando derecho y, tras refugiarse en varias embajadas, vivió en la clandestinidad hasta el final del conflicto. Esa experiencia cinceló en su alma un anticomunismo diamantino, aunque no por ello se volvió liberal.

Pocos años después a Blas Piñar le ofrecieron un cargo diplomático en Filipinas, pero él prefirió continuar su carrera de notario con el fin de ganar una mayor preparación antes de volcarse en la política. Mientras tanto, en 1946 se celebró en San Lorenzo de El Escorial un congreso de países hispanoamericanos llamado Pax Romana, en el cual se decidió crear una institución pública que fomentase los vínculos culturales entre los diferentes países hispanos y fue a la dirección de la misma a la que, ya en 1957, accedió nuestro protagonista.

El Instituto de Cultura Hispánica
Más allá de las innumerables polémicas en las que estuvo envuelto en su casi centenaria vida, de los aciertos o errores de su activismo político que hemos esbozado previamente, fueron los cinco años que estuvo al frente de esta institución los más fructíferos, aquellos que ahora quisiéramos resaltar por el ejemplo que suponen para el presente y futuro y, aún diríamos, los que también él mismo consideró más importantes de su trayectoria, pues gracias a ellos según dijo «tuve el raro privilegio de hacerme español del todo, al ganar la dimensión americana y filipina». A este periodo dedicó el completísimo libro Blas Piñar y la Hispanidad la profesora de la Universidad Complutense Margarita Cantera Montenegro, que tomaremos como referencia en las próximas líneas. Capitaneando el Instituto de Cultura Hispánica nuestro protagonista fue desarrollando toda una cosmovisión acerca de la Hispanidad, descrita a menudo en términos poéticos, pero muy consciente al mismo tiempo de la realidad y los obstáculos a los que se enfrentaba. Su planteamiento de esta partía de tres premisas que se deducen cada una de la anterior.

En primer lugar, la Hispanidad no debe entenderse como nostalgia imperial. Aunque debemos estar orgullosos de nuestra historia, decía, el Imperio fue solo «una fórmula política, un expediente pasajero, contingente, susceptible de mudanza y de cambio». La independencia política de las naciones que la conforman no debe entenderse como una traición o deslealtad, más bien al contrario, como explica en su discurso Mística y política de la Hispanidad: «Creímos que las Provincias emancipadas hacían, con el gesto independiente, una manifestación tajante, definitiva y pública de repudio a la España materna y progenitora que, cubierta de luto, lloraba la incomprensión de sus hijas, cuando la realidad era que la España de comienzos del XIX era la hija mayor que había desfigurado su rostro, la "vieja y tahúr, zaragatera y triste", que dibujara Antonio Machado y que repelía a la más noble juventud de América. Las provincias españolas de América y de Asia, Hispanoamérica y Filipinas, repudiaron a esa España en metamorfosis que se había traicionado a sí misma, pero no repudiaron a la Hispanidad. Más aún, por ser fieles a la Hispanidad, por entender que la España de su tiempo no respondía a las exigencias ideológicas del mayorazgo, se hicieron independientes y soberanas». En consonancia con lo anterior, Piñar sostenía que de la misma manera que cada americano debe reaccionar con orgullo al estudiar la figura de los conquistadores, los españoles debían percibir como héroes propios a cada uno de los emancipadores. Él mismo dedicó múltiples discursos a glosar la figura de Simón Bolivar, «criollo ilustre, español de temperamento y porte», así como acudió a la inauguración en 1960 de una exposición sobre su figura en Bilbao (ciudad en la que el libertador vivió una temporada y donde llegó a casarse con una lugareña).

En segundo lugar, como expuso en otra ocasión, «España es uno más entre los pueblos hispánicos, en pie de igualdad con ellos, sin ningún asomo de hegemonía, paternalismo o dirección». España es la madre común de los países hispanos, creó la Hispanidad («ese fue su secreto y su orgullo») pero no es la Hispanidad, siguiendo una hermosa metáfora que tomó de un poeta uruguayo: «es como una llama que, encendida en el leño ancestral de los olmos, los robles y las encinas de la Península, prende y a la vez se nutre, vigoriza y alimenta con las maderas y los troncos de vuestros montes y vuestras cordilleras vírgenes». Un imperio que se fundó sobre el principio establecido por Isabel la Católica de que los americanos eran vasallos semejantes a los de la península y que replicó sus instituciones, trasplantando su cultura y valores al nuevo mundo, donde buscó almas que evangelizar antes que recursos que expoliar (la Corona cobraba el Quinto Real, dejando el 80% restante a los virreinatos), no tendría sentido que sirviera de matriz para un proyecto político eurocéntrico de subordinación y dominio neocolonial. En línea con lo anterior, también consideraba que «no podemos desunirnos porque simpaticemos o antipaticemos con el régimen político interno de cada país». Propósito que sigue teniendo plena vigencia hoy día, si lo aplicamos particularmente al signo político de cada gobierno y cada presidente.

En tercer lugar, como consecuencia de los anteriores, la Hispanidad es ante todo una tarea pendiente, un proyecto para el futuro, citando a su admirado Maeztu es una flecha caída a mitad del camino, que espera el brazo que la recoja y lance al blanco, o una sinfonía interrumpida, que está pidiendo los músicos que sepan continuarla, «es más que recuerdo, empresa; más que sentimiento, voluntad de fundación (…) hecha de cielo y barro, de estrella y surco». Según la descripción de su propósito hecha por la mencionada Margarita Cantera «su obsesión por lograr la articulación plena de la comunidad de pueblos hispánicos respondía a la conciencia de que cada una de nuestras naciones aislada apenas puede aspirar a hacerse respetar en el panorama mundial, y especialmente frente a las más poderosas que marcan las pautas de la política internacional. Pero si realmente se articulase la comunidad, la Hispanidad conseguiría la fuerza de una gran y poderosa familia por el número de habitantes que la forman y sus posibilidades económicas, muchas de ellas apenas desarrolladas y tendría una fuerte presencia en el orden mundial». La geopolítica como razón última.


Autor: Javier Bilbao Nacido en Baracaldo como buen bilbaíno, estudió en San Sebastián y encontró su sitio en internet y en Madrid. Ha trabajado en varias agencias de comunicación y escribió en Jot Down durante una década, donde adquirió el vicio de divagar sobre cultura/historia/política. Se ve que lo suyo ya no tiene arreglo.

Fuente: Ideas

domingo, 7 de enero de 2024

Tlahuicole - El Último Guerrero de Tlaxcala

En las tierras altas de Tlaxcala, en una época dominada por el poderío azteca y las luchas interminables, nació una leyenda: Tlahuicole, un guerrero cuya fama trascendería el tiempo y se convertiría en un símbolo de valentía y honor.

Tlahuicole, nacido en el seno de un pueblo conocido por su destreza y valentía en el combate, pronto destacó por su habilidad y coraje en la batalla. Su nombre resonaba en los valles y montañas, y su reputación crecía con cada victoria. Era un guerrero que combinaba fuerza física con un profundo sentido del honor, características que lo llevarían a enfrentar los más grandes desafíos.

La fama de Tlahuicole llegó a oídos del emperador azteca Moctezuma, quien, impresionado por sus hazañas, lo convocó a Tenochtitlán. En un acto inusual, el emperador ofreció a Tlahuicole una posición de gran honor entre sus guerreros. Sin embargo, Tlahuicole fiel a su pueblo y sus raíces, rechazó la oferta, deseando volver a su tierra natal. Moctezuma, respetando su decisión pero deseoso de mantener cerca a un guerrero de tal magnitud, lo retuvo, y Tlahuicole se vio obligado a luchar para los aztecas.

A pesar de servir a un imperio que no era el suyo, Tlahuicole nunca perdió su honor ni su valentía. Se dice que en la ceremonia del gladiador, donde se esperaba que fuera sacrificado, luchó con tal fiereza y habilidad que Moctezuma, nuevamente impresionado, le ofreció la libertad. Pero Tlahuicole, fiel a su código de honor y sabiendo que había sido capturado en batalla, eligió un destino de gloria y sacrificio, convirtiéndose así en un símbolo eterno del valor y la integridad.

La historia de Tlahuicole ha sido narrada a lo largo de los siglos, un eco de un pasado donde la valentía y el honor eran la esencia del espíritu guerrero. Su legado perdura en Tlaxcala y en todo México, recordándonos que la verdadera grandeza se mide por la fuerza del corazón y la lealtad a nuestros principios.

jueves, 25 de agosto de 2016

Cinco Principios de la Vida Ordenada


Existe un esquema de acontecimientos que sirve para guiar al hombre por la senda de la evolución, pero que se está rompiendo continuamente debido a nuestra locura egoísta e "impropias condiciones de existencia".

Para comprender lo que se pide de nosotros, no solo debemos conocernos a nosotros mismos, sino también hemos de conocer las "Leyes de la Creación y de la Conservación del Mundo".
En este sentido, todo ser humano debería esforzarse por contemplar en su vida los "Cinco Principios de la Vida Ordenada".

1. Tener en su existencia ordinaria todo lo satisfactorio y verdaderamente necesario para el cuerpo planetario.

2. Tener una necesidad constante de la perfección propia como ser.

3. Conocer cada vez más cosas relacionadas con las leyes de la Creación del mundo y su conservación.

4. Pagar la deuda contraída por el ser y la individualidad lo antes posible, para después ser libres y mitigar en todo lo posible la afición de nuestro Padre Común.

5. Ayudar siempre para que los demás seres alcancen la perfección lo antes posible, hasta el grado de individualidad propia.

viernes, 15 de abril de 2016

Noosfera

Mirando los avances tecnológicos, comerciales y de las comunicaciones que reducían distancias y ponían las bases de lo que él prefería llamar mundialización, en lugar de globalización, Teilhard de Chardin decía, ya en los años 30 del siglo XIX: estamos asistiendo a la emergencia de una nueva era para la Tierra y la humanidad.

Va a irrumpir, nos decia de Chardin, la Noosfera, después de haber irrumpido en el proceso evolutivo la antropósfera, la biosfera, la hidrosfera, la atmósfera y la litosfera. Ahora es la nueva esfera, la esfera de las mentes y de los corazones sincronizados: la noósfera. Como saben noos (nus) en griego significa el espíritu y la mente unidos al corazón.

¿Hacia dónde vamos? Me permito creer y esperar que vamos todos a asistir a la lenta pero irrefrenable irrupción de la noósfera. Los seres humanos y los pueblos van a descubrirse y aceptarse como hermanos y hermanas, como familia y como una especie única, capaz de amar, de ser solidaria, compasiva, no violenta, justa, fraterna, pacífica y espiritual.

¿Es una utopía? Si, una utopía, pero una utopía necesaria. Ella nos orienta en nuestras búsquedas. La utopía es, por su naturaleza, inalcanzable. Pero es como las estrellas: son inalcanzables. ¿Pero qué serían nuestras noches sin las estrellas? Serían pura oscuridad y estaríamos sin rumbo y perdidos. Por eso la utopía nos da dirección y sentido de vivir y de luchar.

La noosfera es, pues, el nuevo paso para la Humanidad. El paso nuevo tendrá como contenidos principales: la vida en todas sus formas, la Humanidad con todos sus pueblos y etnias, la Tierra como Madre con toda su vitalidad y la economía creando las condiciones materiales para que todo eso se haga posible. Vamos a necesitar del capital material acumulado pero el acento será sobre el capital humano y espiritual cuyos frutos mejores son fraternidad o hermandad, cooperación, solidaridad, "amorización", justicia económica y ecológica, compasión y capacidad de vivir alegremente con todas las diferencias, en la misma Casa Común, la grande y generosa Madre Tierra.



Palabras del Presidente de la Asamblea General a la adopción del «outcome document» de la Conferencia Internacional de Naciones Unidas sobre la Crisis Financiera y Económica Mundial y Su Impacto Sobre el Desarrollo. Nueva York, 26 de Junio de 2009. Silio 28-Luna Cristal. Mago Cósmico Blanco

domingo, 27 de marzo de 2016

Secretos Sexuales

Tanto las enseñanzas tántricas como las taoístas presentan una iluminada concepción de la sexualidad que supondría una gran contribución para la cultura occidental. Tal actitud no solo exige reconsiderar “nuestra actitud” con respecto al sexo, sino que ofrece un sistema práctico y evolutivo de vida, donde la sexualidad adquiere una finalidad espiritual. Ahora que las jerarquías sociales han perdido su significado y que los gobernantes han abandonado su función de embajadores de los dioses, los secretos sexuales se abren camino dentro de las principales corrientes de pensamiento, secretos que ya no están reservados a unos cuantos seres elegidos y que nos obsequian con profundas introspecciones sobre la verdadera naturaleza y propósito de la existencia.
Las enseñanzas son eternas, optimistas y trascendentales. La concepción global de la sexualidad que describen va desde este mundo hasta el siguiente, trascendiendo incluso los límites de la vida y la muerte.

Las tradiciones orientales siempre han mirado la sexualidad como una forma de arte que merece respeto. En lugar de considerarla tabú, con todas sus consecuencias negativas, el Oriente veía en este acto tan natural un acontecimiento propicio, venerable e incluso “afortunado”.

Tanto el tantra como el taoísmo enseñan que las actitudes y prácticas sexuales incorrectas son la causa oculta de problemas tanto psicológicos, como físicos y espirituales. La sexualidad orientada de modo positivo ofrece el método más directo y armonioso para resolver dichos problemas.

Cuando se armoniza la sexualidad con la espiritualidad natural, se abre toda una nueva dimensión de la realidad. Pudiendo afirmar con toda seguridad que la sexualidad creativa y libre de sentimientos de culpa es una panacea para muchas enfermedades psicológicas modernas.

La liberación sexual implica la liberación de todo el ser: cuerpo, mente y espíritu. Este punto de vista global resulta indispensable para entender los secretos sexuales. No se precisa abandonar creencias religiosas para practicar los secretos sexuales, ni tampoco adoptar los puntos de vista hindúes, budistas, tántricos o taoístas. Los secretos sexuales forman parte de todas las religiones importantes, aunque muchas de ellas han sido oscurecidas o se han perdido. Solo el tantra y el taoísmo los conservaron intactos. Los secretos sexuales no han de tomarse como un dogma, sino como una colección de verdades que han resistido a la prueba del tiempo.

miércoles, 13 de enero de 2016

Conciencia de la Riqueza

El primer paso hacia tener riqueza es saber qué es. Pocas personas saben lo que realmente es la riqueza en sí misma. ¿Qué es la riqueza? ¿Qué es lo que causa la riqueza? ¿Qué es lo que causa la causa de la riqueza?


Comencemos con el dinero, el símbolo mundial de la riqueza y después profundicemos más.
El dinero es simplemente un instrumento legal, una forma de intercambio. Lo usamos para intercambiar valor. Representa valor.
El dinero es el “cuerpo” del valor. Es la representación física del valor que sube y baja en nosotros mismos, dentro de nosotros. No dentro de “las cosas” fuera de nosotros sino adentro nuestro. ¿Qué sería del valor de las cosas, tales como un auto, sino fuera por nosotros? Nada, por lo menos para nosotros. En otras palabras, somos nosotros, los observadores, los que ponemos valor en las cosas. Las cosas materiales no tiene valor “monetario” en sí mismas, nosotros se lo damos. Por lo tanto, el dinero es la representación física de un sector particular de nuestro valor interno, dentro de nosotros, dentro de ti. Por esa razón es que una casa o las acciones de una empresa que hoy están valuadas en un millón de dólares pueden caer, mañana, en su valuación a la mitad cuando se introduzca el miedo en los corazones de aquellos que están involucrados. El miedo mata una porción del valor interno de los participantes y esto es reflejado en el papel moneda o sea el “cuerpo” del valor.

Aquí hay algo más: el papel moneda ni siquiera representa al dinero en su totalidad. Razonablemente, no puede representarlo. Según algunas estimaciones (que varían según el país) solo un 4% del dinero que está en los bancos existe como dinero en efectivo. Imagínate cuanta fibra de algodón, lino, pulpa de papel y metal se necesitaría para fabricar todo el dinero que todo el mundo tiene en su cuenta bancaria. Imagínate cuanto espacio se necesitaría para almacenar todo ese dinero en forma de papel moneda. Si uno tuviera que apilar un millón de dólares en billetes de un dólar, la pila pesaría una tonelada y tendría una altura de cien metros. El dinero ni siquiera existe más como reservas de oro. Exactamente por esa razón, en la década de los 70, nos quedamos sin la capacidad razonable de mantener un patrón oro.
Entonces, ¿Qué es lo que existe como el dinero del que estamos hablando?
Bueno, es una ilusión masiva. Son solamente números escritos en papel o guardados en dispositivos de almacenamiento de las computadoras, para ser más precisos, ¡registros! Para decirlo de otra manera, por cada 100 dólares o su equivalente en cualquier otra moneda, solamente 4 dólares existen como billetes o monedas, mientras que los 96 dólares restantes existen como números escritos sobre papeles o datos de computadoras en los bancos, empresas y otras entidades.
La única razón por la cual el sistema no colapsa es porque nosotros creemos en él.
La última vez que la gente dejó de creer en el sistema a gran escala fue en la Gran Depresión cuando gran cantidad de gente salió corriendo a los bancos para retirar su dinero. Esta no fue la causa de la Gran Depresión, pero en gran medida, fue lo que la aceleró.
Por lo tanto, el dinero no es la realidad de la riqueza, algo más lo es. El dinero es sólo la sombra de otra cosa. El primer paso hacia la riqueza es conocer qué es lo que realmente es el dinero, o para ser más precisos, que es lo que representa. Aprende a no mirar el dinero la mayor parte del tiempo. Como verás a continuación debería ser raro el día que mires al dinero de la manera en que lo haces hoy en día -el efectivo, las cuentas bancarias, los costos, etc. Esto es meramente la sombra y no lo real. Mirar la sombra, el dinero físico, como vas a comprobarlo enseguida, es desaconsejable y no saludable para ti y tus finanzas.
En lugar de eso mira el valor dentro tuyo, dentro de las personas y el flujo e intercambio de este valor entre la gente. Nuestro valor interno es lo que crea dinero.

Conciencia de Riqueza
El dinero es la sombra de nuestro valor interno. Desarrolla ese valor interno en ti mismo y en los demás y tu dinero exterior y riqueza aumentará automáticamente, sin falla.
Sin embargo ten cuenta esto: el dinero representa un aspecto del valor interno de una persona pero no significa que represente todo el valor interno. Esto es muy importante. Esto no se trata de autovaloración. El dinero representa un aspecto del valor interno relacionado con la riqueza. Por lo tanto no puedes decir que una persona rica tiene una autovaloración o valor más alto que una persona pobre, pero puedes decir correctamente que en temas que se relacionan con el dinero, la persona rica tiene un valor interno más elevado en ese aspecto del valor en que la persona elige ejercitar una proporción mayor de su valor interno. Esta zona del valor interno que se refleja en el dinero externo, cuando se la ejercita, se llama Conciencia de Riqueza. Está disponible para todas las personas por igual y puede ser desarrollada por y dentro de todas las personas por igual. Como cualquier otra cosa que es importante para el mantenimiento de la vida, tal como el aire, la conciencia de la riqueza es gratuita para todos. Uno puede elegir desarrollarla o no, ejercitarla o no.
En cualquier momento puedes cambiar tu elección y nada fuera de ti puede detenerte.
No necesitas nada fuera de ti para aumentar tu conciencia de la riqueza y por lo tanto del dinero. Todo lo que necesitas esta dentro de ti ahora mismo. Puede que te hayas olvidado pero está ahí. Vas a recordarlo y el primer paso es recordar siempre que el dinero no es real; es la sombra de algo más.

Y aquí hay otro secreto: la Conciencia de la Riqueza es simplemente la expansión de tu conciencia y la percepción de las partes abundantes dentro de tu ser. Por esa razón es que todo lo que necesitas para aumentar tu Conciencia de la Riqueza ya está dentro tuyo. Tú ya eres rico, pero te enseñaron a elegir el no experimentar tu riqueza. Este conocimiento cambia todo. Tal como lo hacen los ricos, tú puedes saber ahora cómo hacerlo y empezar a experimentar la riqueza en ti.
Tú tienes mayor capacidad de riqueza dentro de ti de la que puedas experimentar en todo tu tiempo de vida. No necesitas preocuparte si has alcanzado tu límite de volverte rico de alguna forma en particular o debido a cualquier circunstancia. Ni siquiera tienes que saber cómo convertir la Conciencia de la Riqueza en papel moneda en efectivo, pues, como verás, ocurrirá automáticamente.
Todo lo que necesitas hacer es expandir tu Conciencia de la Riqueza y ejercitarla, actuar sobre ella, ser ella. Las situaciones y oportunidades para la conversión equivalente a dinero en efectivo se te presentarán automáticamente. Ninguna de las personas que hoy son extremadamente ricas, podrían haber pronosticado, cuando no eran ricas, la secuencia exacta de los eventos que condujeron a tener una riqueza tan inmensa. Probablemente tenían un conjunto de metas y un plan pero cualquiera de ellos te puede decir que se cruzaron con incontables “coincidencias” y oportunidades que terminaron de “unirle los puntos” de maneras que nunca podrían haber pronosticado. Sus metas eran su propio hacer pero los caminos que los llevaron a su realización y aun los excedieron fueron increíblemente inteligentes y aun así, impredecibles. Verás ahora cómo hacer que eso te pase en tu vida – tal vez no puedas predecir la secuencia pero ciertamente puedes hacer que esas “afortunadas coincidencias” te sucedan cada día de tu vida.
A propósito, no sólo el papel moneda no es la verdadera riqueza. Muchas de las cosas que te rodean y que consideras reales, en realidad, son ilusiones. Te estás por embarcar en un hermoso viaje que te da poder y libertad y que te va mostrar exactamente qué es el mundo desde una perspectiva que nunca antes habías tenido. Es un viaje que te abrirá los ojos y te desatará las alas. Estás por mirar qué es lo que hay “debajo del capó” de la Vida; estás por aprender cómo adaptar tu mundo a tu gusto. Estás por alcanzar la Conciencia de la Riqueza. Una vez que lo hagas se te va a hacer difícil evitar el éxito y la riqueza. El éxito y la riqueza te seguirán automáticamente. Sí, leíste bien. No tienes que preocuparte con su búsqueda y aun así ellos te van a encontrar. Vas a ser libre de experimentar otros aspectos de la vida que ni siquiera soñaste antes, dimensiones del Ser y de la Vida que son verdaderamente increíbles.

lunes, 27 de octubre de 2014

Comprendiendo la Sincronicidad

«Cuando el alumno esté preparado, el maestro vendrá.» Este antiguo proverbio chino describe una idea básica en el pensamiento oriental: la conexión entre la psique humana y los acontecimientos externos, entre el mundo interior y el mundo exterior. La sincronicidad, definida por Carl Gustav Jung como una “coincidencia significativa”, es uno de los modos en que esta conexión se expresa en nuestras vidas diarias. El pensamiento oriental ha estudiado la conexión fundamental entre nosotros y los demás, entre nosotros y el universo, la realidad esencial, y le ha dado el nombre de Tao. Para aquellos que han experimentado el poder de los acontecimientos, sueños y encuentros que parecen entrañar un sentimiento que trasciende su apariencia, puede ser una ventana hacia un universo más vasto y completo que el mundo del razonamiento lógico y los hechos concretos.

Podemos comprender inmediatamente la sincronicidad cuando observamos cómo opera en nuestra vida cotidiana. Además de conferir un sentido a los hechos cotidianos, el concepto de sincronicidad puede procurarnos nuevas perspectivas respecto a ciertas ideas. Por ejemplo, el I Ching es un método oracular en el que un interrogante produce deliberadamente una “lectura” por medio de la sincronicidad, que entonces guía las acciones o actitudes apropiadas a ese momento y situación. La sincronicidad arroja luz en la investigación parapsicológica, que acredita la existencia de vínculos entre nosotros y los demás, entre nosotros y los objetos.
Gran parte del valor de la sincronicidad reside en su capacidad de adherirnos a un sentido dado, un principio intuitivamente conocido en nuestra vida, a partir del cual podemos encontrar un “sendero del corazón”, un tao, un modo de vivir en armonía con el universo. La sincronicidad puede aportarnos la confirmación de que estamos en el camino adecuado, así como hacernos conscientes de que no lo estamos.
Finalmente, en el nivel más profundo, la sincronicidad puede abrirnos al conocimiento de que formamos parte de algo mucho más grande que nosotros mismos, y a un sentido de totalidad en el arquetipo del sí mismo, expresando metafóricamente en la leyenda del Santo Grial, en el concepto del reino de Dios, o en la disolución en el Tao.

La mayor parte del tiempo estamos activos, imitando lo que es preciso hacer y rodeados de gente. Nos centramos en lo que tenemos delante, afanándonos en los bienes materiales de nuestras vidas con el tiempo apresurado y el limitado espacio disponible. No podemos ver las estrellas con la luz de nuestro mundo cotidiano. Aún de noche, nuestra visión del cielo está limitada por las luces de nuestras ciudades y la contaminación de nuestras máquinas. Permanecemos recluidos en edificios, enclaustrados, privados de la naturaleza circundante; nos afanamos de tal modo con nuestros asuntos vespertinos que no somos capaces de alzar la mirada y experimentar el asombro del cielo nocturno. Pero, aunque no lo vemos, las estrellas siguen ahí. Hay un universo que continúa moviéndose, infinito, atemporal, en continua expansión, del cual formamos parte. Comprender esto intuitivamente, contemplando un fragmento de cielo nocturno, antes de caer de nuevo en el sueño, puede ser similar a los que el estudiante zen persigue en la meditación: ese momento de iluminación repentina en la que se experimenta la visión del Tao.

El conocimiento intuitivo de que hay un universo reglado, o un sentido subyacente a cada experiencia, o una fuente original, con la cual “yo” estoy conectado, evoca siempre un sentimiento de reverencia. Esto es algo más intuido que pensado, por lo que las palabras que traten de explicarlo resultan inadecuadas; tal como comienza el Tao Te Ching, de Lao Tsé, « El Tao que puede ser expresado no es el Tao perpetuo»; sin embargo, los ejemplos ayudan a la comprensión, porque casi todos nosotros, frecuentemente en etapas tempranas de nuestra vida, hemos tenido una intimidad con lo que se llama el Tao.
Hay buenas razones para discutir lo que no puede conocerse enteramente a través de las palabras –porque podemos preparar el modo en que sobrevendrá una experiencia–. El conocimiento intelectual y la aceptación de un concepto espiritual, unido a la receptividad y la abertura, ponen los cimientos para una experiencia intuitiva que puede acontecer más adelante. Como dice el proverbio oriental, «Cuando el alumno está preparado, el maestro vendrá».

Jung describió la sincronicidad como un principio conector casual que se manifiesta mediante coincidencias significativas. No hay explicaciones racionales a estas situaciones en las que una persona tiene un pensamiento, un sueño, o un estado psicológico interno que coincide con un acontecimiento. Por ejemplo, una mujer tiene el sueño vívido de que la casa de su hermana está ardiendo e impulsivamente la telefonea para comprobar si se encuentra bien: hay fuego, y la llamada que la despertó quizás haya salvado su vida. O un investigador se atasca en un punto crucial y necesita cierta información abstrusa, muy técnica, y en una cena de recogida de fondos se encuentra inesperadamente sentado junto a la persona que posee esa información. Una mujer llega a una ciudad deseando encontrar a una antigua compañera de habitación; no la localiza, y al entrar en un ascensor atestado la encuentra en él. Pienso en alguien, suena el teléfono, y quien llama es la persona que tenía en mente.
Todos estos son ejemplos de sincronicidad, que varían desde lo dramático al lugar común. En cada situación, alguien se tropezó con una coincidencia y no pudo explicar cómo había ocurrido. Intuitivamente, cada acontecimiento fue significativo y abrió la posibilidad de que allí hubiera una conexión invisible, desconocida, o un modo en el que se desarrollan esos hechos.
Al decir que este fenómeno era “sincronicidad”, Jung le dio un nombre. También señalo su importancia, diciendo que «la comprensión de la sincronicidad es la llave que abre la puerta a la percepción oriental de la totalidad, que nos parece tan misteriosa».

A través de la sincronicidad, la mente occidental puede llegar a conocer lo que representa el Tao. Como concepto, la sincronicidad tiende un puente entre Oriente y Occidente, filosofía y psicología, el hemisferio derecho e izquierdo del cerebro. La sincronicidad es el Tao de la psicología, pues relaciona el individuo con la totalidad. Si personalmente advertimos que la sincronicidad opera en nuestras vidas, nos sentimos conectados a los demás, antes que aislados y malavenidos; sentimos que formamos parte de un universo divino, dinámico e interrelacionado. Los acontecimientos sincronísticos nos ofrendan percepciones que pueden resultarnos útiles en nuestro crecimiento psicológico y espiritual, y acaso nos revelen, a partir de un conocimiento intuitivo, que nuestras vidas tienen sentido.

Hay algo asombroso y humilde, y sin embargo emocionante y cómplice en el hecho de vislumbrar el Tao a partir de acontecimientos sincronísticos. Al igual que no podemos ver las estrellas al mediodía, en nuestras mentes occidentales no se dan las condiciones adecuadas para “contemplar” un modelo de unidad subyacente. En el momento en que, con nuestra conciencia occidental, también seamos capaces de percibir una realidad espiritual, acaso sea posible que nos volvamos conscientes de ser individuos aislados pero unidos a un todo más vasto: de vivir en un mundo con un tiempo lineal, pero capaces de experimentar la atemporalidad de una realidad eterna de la que somos parte; de ver la luz diurna tanto como con visión nocturna, entonces sentimos nuestra conciencia en movimiento, ya no detenida.

lunes, 14 de abril de 2014

Los Adultos Indigo

Los otros niños de aura azul han crecido, dando paso al surgimiento de adultos muy especiales, que por desconocimiento no logran comprenderse a sí mismos ni menos adaptarse al sistema.

En las últimas décadas hemos escuchado hablar de los niños índigo, cuyos nacimientos aumentaron en número hace más de 20 años. Una especie de “raza” cuya misión es luchar contra el sistema establecido.
“Se les denomina índigo porque su aura contiene una gran cantidad de color azul índigo, el color de la intuición y la espiritualidad. Después de la Segunda Guerra Mundial empezaron a nacer índigos, aumentó su número en los años 70 y se hizo un fenómeno más masivo en los años 80”, explica la psicóloga Esther Morales León, quien es miembro del equipo de Niños Índigo de Chile.

Pues bien, a estas alturas muchos de los pequeños ya se instalaron en la vida adulta, la mayoría sin siquiera saber si pertenecen a este grupo y, por consiguiente, sin llegar a entenderse.
Un tema que para ellos resulta clave. “Su tarea es aceptarse, valorizarse y encontrar su particular misión en la vida, haciendo uso de todos los talentos que tienen y de su elevado nivel de conciencia, para ser un real aporte a la evolución planetaria”, plantea la experta, quien nos ayuda a dilucidar qué adultos se ajustan a estas características.

Idealistas, perceptivos, rebeldes

El adulto índigo se caracteriza por:
1) No encaja: El índigo es una persona muy sensible, inteligente y creativa, disfruta haciendo cosas, tienen profunda empatía por otros, pero también intolerancia ante la estupidez; puede tener problemas con el enojo y la ira. Se siente diferente a la masa, no encaja, le cuesta adaptarse, es modelo para otros. Se resiste ante la autoridad y el sistema laboral jerárquico, prefiere esfuerzos cooperativos, posiciones de liderazgo o trabajar solo.
2) Ha tenido experiencias psíquicas: nos referimos a premoniciones, ver ángeles o fantasmas, experiencias fuera del cuerpo, escuchar voces. Al poder conectar con otras dimensiones, pueden ver el aura, percibir la energía de personas y lugares, soñar o saber cosas que ocurrirán en el futuro, adivinar el pensamiento, tienen amigos imaginarios, ver elementales, ángeles, seres desencarnados, etcétera.
3) Ligados a lo espiritual: busca el significado de su vida y comprensión del mundo a través de religión o espiritualidad, grupos y libros de autoayuda.
4) Quieren mejorar el mundo: siente un ardiente deseo de hacer algo para cambiar y mejorar el mundo, pero puede tener problemas para identificar su camino. Tiene problemas con los sistemas que considera ineficientes, como por ejemplo, político, educativo, médico y legal.
5) En la infancia: tiene una clara conciencia de sí mismo, es muy perceptivo e intuitivo, trae una sabiduría innata, desarrolla el pensamiento abstracto desde pequeño, es dotado y/o talentoso, soñador y visionario.
6) Creativo: aprende de manera reflexiva y no repetitiva cosas diferentes, pero cuando tiene suficiente conocimiento, los dejan por aburrimiento. No comulga con el sistema escolar actual, es rebelde a las normas y estructuras, tiene dificultades con la disciplina y la autoridad, no responden a mecanismos de culpa, quieren buenas razones.
7) Hipersensible: poseen una gran sensibilidad por la naturaleza, y mucha conexión de tipo espiritual, probablemente se le diagnosticó como niño con síndrome de déficit atencional con y sin hiperactividad.
8) No a la mentira: le desagrada la mentira y la falsedad, tienen un desarrollado sentido de justicia, son sanadores, hipersensibles visual, auditiva y kinésicamente, se conectan con la otra dimensión, pudiendo ser videntes o perciben una realidad que otros no ven...

Con ellos, en lugar de usar medicamentos para solucionar “problemas”, como es muy común, hay que optar por medidas que se ajusten a su esencia.
“Responden excelentemente a las terapias energéticas, a los remedios naturales, la homeopatía y les hacen muy bien los alimentos y bebidas naturales, sin aditivos químicos, colorantes y azúcares. Se benefician del contacto con la naturaleza y prácticas como el yoga, tai chi y les encanta el reiki”.

E. Morales L.

martes, 31 de diciembre de 2013

La Practica del Dominio del Tiempo

Para dominar el tiempo, tienes que abandonar la idea de que el efecto sigue a la causa, y entrar en la corriente de la intemporalidad.
En Occidente, se nos ha enseñado que el tiempo sólo fluye en una dirección, y que el futuro siempre está delante de nosotros y el pasado atrás. Éste es el tiempo monocrónico, que fluye de forma lineal, avanzando lentamente día a día. Pero el tiempo no sólo avanza como una flecha; también gira como una rueda. Por eso el tiempo no lineal, o tiempo policrónico, es considerado sagrado. Aquí el futuro se filtra en el presente para convocarnos, y podemos cambiar acontecimientos que ya han sucedido.

El principio operativo más importante del tiempo lineal es la causalidad, o causa y efecto, que constituye la base de la ciencia moderna: esto ocurre, por lo tanto aquello ocurre. La causalidad quiere decir que el pasado siempre está moldeando el presente.
Creemos que nuestra vida es un desastre porque nuestros padres no nos quisieron lo suficiente cuando éramos niños o porque descendemos de una larga línea de inadaptados. Pero cuando nuestra percepción del tiempo es circular, el principio operativo más importante es la sincronicidad o la producción fortuita de los acontecimientos. Lo que llamamos coincidencia o suerte es un principio operativo tan importante como la causalidad.

El hecho fortuito de los acontecimientos, como cuando dos personas se encuentran accidentalmente, es tan significativo como su causa (por qué esas dos personas se hallaban en el mismo lugar a la misma hora). La sincronicidad está más interesada en el propósito y el significado de un acontecimiento que en su causa.
Por lo tanto, si el tiempo fluye realmente en más de una dirección, el futuro puede atraernos hacia sí de la misma forma que el pasado nos empuja hacia delante. El motivo por el cual no lo hace así es porque percibimos el tiempo de manera lineal. La causa de un acontecimiento presente puede de hecho estar en el futuro. En otras palabras, en los días en que te toquen todos los semáforos en rojo cuando vayas camino al trabajo, no comiences a pensar que deberías haberte quedado en cama porque el universo está conspirando contra ti. Más bien, reconoce que estás operando en un tiempo sagrado y que el universo está conspirando a tu favor. Hace que el tren salga con tres minutos de retraso porque ése es el tren que debes tomar, o hace que te toquen todos los semáforos en rojo porque ése no es el tren que deberías tomar.
Si percibimos el tiempo de esta forma, no nos irritamos ni nos reprochamos: «¿Cómo he podido ser tan estúpido para perder este tren? ¿Por qué tengo tan mala suerte?». Nuestro nivel de estrés se reduce enormemente porque confiamos en que tanto la buena como la mala suerte forman parte de un gran plan.


Las Cuatro Revelaciones
Alberto Villoldo

sábado, 13 de abril de 2013

Carta de una Mujer Indígena

Soy una mujer indígena, hija de la tierra y el sol, pertenezco a una raza con una cultura milenaria que hoy conservo como un tesoro…Convivo con lo que me rodea, con la lluvia, el viento, la montaña, el cielo… Soy feliz en estas soledades… tengo tiempo para contar las estrellas, tiempo para poner mis sueños al día, para danzar con los pájaros sintiendo el aire fresco del amanecer y hablar en silencio con los animales, con las plantas, con los espíritus…
Sé sembrar con la Luna los frutos del alimento, teñir la lana para hacer el tejido, hacer medicina como me enseñó mi abuela, cantar al nuevo día.

Sé amasar sencillamente con fidelidad y con ternura… Soy mujer indígena, mujer como la Madre tierra, fértil, callada, protectora y fuerte.
Yo no sé de economía, ni de bancos, ni de política ni subvenciones. Pero si sé cuándo mi mundo está en peligro y sé cuándo las cosas son buenas o no.
No entiendo de muchas cosas, a la gente del gobierno que vienen con muchas promesas, palabras de aire cuando hay elecciones y después nada, a los que vienen a querer cambiar mi mundo, mis vestidos, mi espiritualidad… los que roban, los que experimentan con mis hijos, o les sacan sus órganos para los ricos, los que mienten, los que me sacan las tierras, los que me explotan, los que intercambian mi arte y mis tejidos por comida o alcohol y me pagan una miseria por el trabajo de meses para venderlos en las ciudades lejanas de Europa.

No entiendo a los que se hacen mis amigos para sacarme conocimientos, los que vienen con grandes máquinas para talar el bosque, los que agujerean la tierra para sacarle su sangre, los que esconden en la comunidad basura en bidones para contaminarnos, los que nos ponen vacunas, los que experimentan con mi sangre, los que tienen buena fe y creen que vienen a ayudarme a integrarme poniéndome cables de luz y trayendo la “caja boba” para confundirme, los que me ponen zapatos, los que quieren cambiar mis costumbres ancestrales, los que me miran como un bicho raro y me sacan fotos, los que quieren que baile por dinero, los que vienen con muchas palabras bonitas a hacer iglesias en nuestros lugares sagrados, los que intentan esclavizarme con dependencias ajenas a mi cultura, los que entran armados en nuestras tierras para echarnos, a los extranjeros que vienen de vacaciones de guerrilla a enfrentarme con los militares y luego se van protegidos a sus lejanas tierras… a veces las cosas se ponen peor para nuestra gente, nos apresan, nos matan…

Tampoco entiendo a los que me desprecian, los que me ignoran, los que no les importo nada y me roban todo, hasta mi dignidad… Soy mujer indígena y sé lo que quiero… cambiar cosas, esas cosas que duelen dentro y se van agrandando como la impotencia, el desamparo, la destrucción, las palabras incumplidas, el desamor y ese sentimiento de estar siendo violada constantemente.
Quiero gritar ¡Déjenme en paz!… Quiero seguir viviendo así simplemente, con la tierra y mi gente, la que ríe, la que crea, la que vibra la vida así como es, sin alterar las cosas, la que comparte, la que acaricia, la que no tiene prisa y ama sin esperar nada, la que no se aburre…

Quiero que me respeten, soy mujer de la tierra, fuerte como el árbol que resiste al viento como el junco en la corriente, firme como la montaña más alta, frágil como el colibrí y dulce como los atardeceres.
Soy mujer indígena, hija de la tierra y el sol, y aunque no entienda muchas cosas, sé lo que quiero, tengo esperanza y sé que las cosas van a cambiar.

domingo, 17 de febrero de 2013

La Muerte de los Inocentes

Nacimos de un golpe de sol,
el golpe de una guadaña contra el viento,
el golpe de un cuerno contra la piedra.
Arrojamos la placenta a los perros
y el alma dentro de una pileta de penumbras.
Como las mujeres pobres, bordamos
nuestros labios en la trama del silencio.
Impuros fuimos a la oración de la tarde
en el jardín de flores y las memorias de la infancia.
La arena es nuestro alimento y el forraje del caballo.
Trepamos la arena entre jadeos y destrozados, volvimos.
No había pruebas de nuestros nombres
salvo un alfabeto que no aparece en el diccionario,
no hubo rastros de nuestros antepasados
excepto el silencio de los perros en la puerta.
Nos rebajamos hasta el cordón de los zapatos
y nos atamos al pelo de nuestras pestañas
y a las colas de los cometas.
Nos arrastramos como perros ante la puerta
agachados sin alegría ante la flor
y la flor es el sacrificio sangriento del mediodía.
Esparcieron nuestra harina por todas partes
y la desesperación fue como hierro en los dedos.
Concédenos respiro para que podamos reconocer nuestra sombra
y nuestros cascos puedan crecer.
Una campana gigante pende sobre nuestra cabeza,
una campanada persistente nos hace perder la senda,
rezamos en silencio en el gran repique sobre los labios de los muertos.
Tómanos de la mano y por la cintura sostennos por el pecho:
el polvo y el fuego nos son familiares.
Nuestro dedo, húmedo para conocer de dónde viene el viento
está herido por preguntas sin fin.
Hicimos juegos tontos con nuestros nombres
y confundimos desnudez con los botones de la camisa.
Empujamos las plegarias como cerdos por delante de nosotros.
Atamos los burros a los tobillos de los chicos
y el otoño al verano para calmar los escalofríos.
Nos llaman de detrás de nuestras habitaciones
con una voz escandalosa que nos avergüence estar desnudos;
nos llaman con una voz que separa la madera del bambú
Lleven nuestra oración así podremos rezar más allá de los límites del deber y nuestras almas permanecerán firmes en nuestros cuerpos.
El almuerzo es amargo
la cena, seca como piedra,
y el silencio fluye como la menstruación entre nuestras piernas.
Oramos para aplastar los cálculos renales
y para romper el pan de nuestra cena.
No habrá inmunidad para el canto rodado
o la rosa todos yacen bajo el rango del trueno.
Nacimos en las dobleces del labio
y de la pestaña nacimos del golpe del cuerno contra la piedra.

lunes, 10 de octubre de 2011

Fisica Cuantica: La Primera Clave para Encontrar Tu Camino es Saber de que estas Hecho Tu y el Mundo (2a. Parte)

Muchos físicos que trabajan con partículas subatómicas están descubriendo varias cosas interesantes acerca del universo. Por ejemplo, han encontrado que dos partículas separadas por el tiempo y el espacio pueden estar “invisiblemente vinculadas” entre sí y actuar en sincronía. También han averiguado que el mundo en el que vivimos parece estar construido como si se conociera a sí mismo. Esto parece haber sucedido “cortando” el Uno total en por lo menos dos estados, con un estado diseñado para ver y el otro para ser visto. El que fue diseñado para ver está bajo la ilusión de la separación del que fue diseñado para ser visto. Es una ilusión necesaria y persistente pero en la realidad todo es Uno.

Todo el universo es creado con la participación y observación de aquellos que participan y observan. La riqueza es manifestada debido a que tú y yo la estamos examinando. Tu certeza, tu fe y tu atención es lo que la crean.
En realidad, ya existe como una onda de probabilidad, pero tú, causas que sea una cosa definida, un evento en un punto del espacio y del tiempo. Esto va aún más profundo. Ya existe como un evento pero la percepción del tiempo la hace aparecer “aparte” y “separada”. Una vez que se entiende lo que es el tiempo y cómo funciona, se es capaz de manifestar más rápido y en grandes cantidades.

Ahora vayamos a algo un poquito más complicado. Hemos visto que las partículas subatómicas existen como probabilidades y que cuando las observamos causan su localización en un punto particular del espacio y del tiempo. En otras palabras, una partícula tiene el potencial de estar en los lugares A, B, C y D. Cuando observamos el lugar C, aparece en el lugar C y cesa de tener la posibilidad de aparecer en los lugares A, B y D hasta que dejamos de observar el lugar C.
Muy bien, una nueva escuela de pensamiento está estudiando la teoría de Everett-Wheeler-Graham que dice que los cuantos se localizarán en los cuatro puntos ¡pero en diferentes mundos que coexisten con el nuestro! En otras palabras, todas las posibilidades se manifiestan realmente en lo físico ¡pero en mundos paralelos! Hay evidencias de esto en las investigaciones realizadas por físicos que buscan signos de que el universo es un gigantesco holograma multidimensional. ¿Cómo funciona esto? Cuando una partícula tiene la probabilidad de estar en los lugares A, B, C y D no elegirá solamente un lugar para estar sino que elegirá estar en los cuatro, pero para que esto sea posible, el universo se “parte” en cuatro, sin que cada uno de ellos se dé cuenta de los otros tres. En la mecánica cuántica, a esto se le llama la interpretación de los mundos múltiples ó universos paralelos.

Suena descabellado pero si se piensa un poco, es definitivamente posible –nada es imposible para La Fuente. Muchas religiones nos dicen que aún antes de que lo pidamos ya se nos ha concedido. También nos dicen que todo lo que pueda existir existe Ahora. Hoy en día también sabemos que el universo se parte ó mejor aún que crea la ilusión de la separación, de manera tal que una “pieza” pueda ser la pieza observada y la otra pueda ser el observador para conocerse a sí misma. El Uno se parte a sí mismo de manera que se pueda conocer a sí mismo y tener algo con que compararse. Cuando es solo Uno no tiene nada con lo cual compararse para saber lo que es.

El Ser, el espíritu, es eterno y existe a través del espacio y el tiempo. Ahora bien, la próxima decisión que tomemos partirá el universo. Nos volveremos conscientes de la parte del universo que elijamos. Existiremos en la otra parte que no elegimos, pero no estaremos “despiertos” en ella, a pesar de que sus esencias aún nos lleguen y nos ayuden a conocer lo que elegimos y viceversa.
Otras personas que eligieron el otro mundo que nosotros no elegimos estarán “despiertas” en él pero no aquí, en nuestro mundo. Ahora podemos ver cómo el libre albedrío funciona todo el tiempo sin entrar en conflicto con sí mismo y además, como es que una verdad puede ser aparentemente contradictoria y no obstante ser totalmente verdadera.

El universo también se “parte” en nuestro ser presente, nuestros seres pasados y nuestros seres futuros. Estamos despiertos a uno de esos seres a la vez (nuestro ser presente) pero nuestros futuros seres, por ejemplo, son capaces de advertirle a nuestro ser presente de cosas por las cuales ya pasaron y no les agradaron de manera de que no pasemos por lo mismo. Es una matriz muy compleja y constantemente cambiante. Toda la matriz se desplaza con cada decisión. La vida está constituida de procesos eternos que existen al mismo tiempo con todas las posibles existencias, en este momento. Solamente elegimos una para estar despiertos de instante en instante. La física está recién comenzando a probarlo.

Ahora sabemos que el universo se originó de una existencia similar a la de una partícula subatómica. Desde entonces se ha estado expandiendo a una velocidad más alta de la que podamos imaginar. Se forman océanos, se forman mundos y cosas similares, todo por cortesía de la Física Cuántica.
Pero esto es aún más mágico. El universo está continuamente dando nacimiento a nuevos universos. Muchos físicos ven ahora evidencias de comportamiento acorde a la teoría de los universos paralelos y de varias interpretaciones de la Física Cuántica que existen a este efecto. La mayoría de los físicos creen que la nuestra es una existencia continua pero caótica ó azarosa, principalmente porque no han encontrado otra razón para la existencia. Pero, ¿qué papel juega el Espíritu? ¿Qué rol cumples nosotros, nuestro ser, nuestra alma? ¿Puede ser que nuestras elecciones sean la causa de esta fragmentación “caótica” de los mundos? A los físicos les agrada excluir de sus investigaciones al espíritu a pesar de que éste da nacimiento a la materia y no al revés. Pensemos un poco. Einstein es uno de los pocos físicos que se resistió a creer que todo ocurre de forma caótica o azarosa. Dijo que se resistía a creer que “Dios juegue a los dados”.


El mundo cuántico es el mundo real. El mundo que vemos con los ojos es simplemente una percepción imperfecta de un grupo de actividades cuánticas. Aún así, la actividad cuántica es causada por uno mismo, nosotros somos la Primera Causa. Pero, lo que vemos con los ojos no es la Primera Causa, sino sólo un efecto. Una buena ilustración de ello es el famoso experimento del gato de Schroedinger (propuesto por Erwin Schroedinger, a quién se le otorgó el premio Nobel de Física en 1933). Muestra lo que ocurre cuando se pone un gato en una caja con una botella de gas venenoso. Se coloca un dispositivo dentro de la caja, el cual puede abrir la botella de gas y por lo tanto matar al gato. Luego uno cierra la caja de manera que no se pueda ver lo que hay adentro. A propósito, el gas de la botella sólo se vuelve venenoso si un átomo radiactivo en particular, se descompone.
La Física Cuántica muestra que éste átomo radiactivo existe simultáneamente en los estados de “descomposición” y de “no descomposición” hasta el momento en que se lo mida (o sea hasta que se abre la caja para ver si el gato está vivo o muerto). (Todo existe en todos los posibles estados hasta que se observa), no se puede saber si el gato está vivo ó muerto sin abrir la caja. Mientras que la caja permanezca cerrada, el gato está, al mismo tiempo, tanto vivo como muerto.
Por esta razón es que la Física Cuántica parece ser tan loca- ¡dos estados contradictorios existen al mismo tiempo! Es, en el momento en que uno abre la caja para verificar si se descompuso ó no el átomo radiactivo y por lo tanto si el gato está vivo ó muerto, cuando uno de estos dos estados se materializa.

Aún así, los físicos saben ahora que (1) sus expectativas y pensamientos influyen en los resultados y (2) la interpretación de los mundos múltiples ó universos paralelos nos dice que ambos ocurren pero el mundo se “parte” en ambos y nosotros tomamos, en algún nivel, aquello que elegimos.

Sabemos ahora que todo en el universo es una dualidad onda-partícula. Lo que esto significa es que todo, incluido el cuerpo y tu casa, son una onda y una partícula al mismo tiempo. No hay diferencia entre nosotros y la luz –excepto por el hecho de que la luz tiene una longitud de onda diferente de la nuestra pero somos aproximadamente lo mismo que la luz. Esto lo dice actualmente la Física. Miles de años atrás, varios maestros espirituales no dijeron lo mismo- venimos de la luz. Somos luz. En efecto, si examináramos el cuerpo con un microscopio encontraríamos que más del 99% es “espacio”. El resto, la parte sólida, es sólo un conjunto de exactamente las mismas cosas de las cuales está compuesta la luz, de las mismas partículas subatómicas. En realidad, incluso el “espacio” está lleno de energía.

Nuestra mente, a partir del espíritu, mantiene al cuerpo “unido” como una unidad “sólida”. Nuestra mente hace lo mismo con otras cosas que nos rodean. Toda la materia es armada usando información de la mente y de las mentes de aquellos que nos rodean y del resto del universo.

La ecuación de Einstein E=mc² establece que la energía contenida en cualquier materia es igual a la masa de esa materia multiplicada por el cuadrado de la velocidad de la luz (¡eso es un número muy grande!). Esto demuestra que 1) aún las partes más pequeñas de la materia tienen una tremenda cantidad de energía dentro de sí (así es como funcionan las explosiones nucleares) y 2) nosotros y el resto de las cosas son solo energía ensamblada con información de la mente.

El mundo subatómico no es para nada estático. Es una increíble danza de interminable creación y destrucción, con partículas que se destruyen a sí mismas y en esa misma destrucción dan nacimiento a nuevas partículas.
La mayor parte de las partículas tienen una inimaginable vida corta (mil millonésimas de segundo). El universo completo se está recreando a sí mismo constantemente. Nos podemos imaginar lo que significa que todo es barrido, limpiado y restaurado solo un poquito diferente cada trillonésima de segundo o algo así.

Aquí hay otra cosa increíble: cuando una partícula es creada, ¡viaja instantáneamente a la velocidad de la luz! Literalmente, venimos de la luz tal como lo cuentan muchos relatos sobre la creación. Una cosa más: las partículas se pueden mover hacia delante o hacia atrás en el tiempo. ¡Esta es la sustancia de la que estamos hechos y sobre la cual tenemos control!

No existe una cosa tal como el espacio vacío. Todo el “espacio” está lleno de energía, la misma energía de la cual estamos hechos nosotros y el resto de las cosas. El caso es que los cinco sentidos de vista, tacto, oído, olfato y gusto no detectan la gran variedad de otros tipos de formas que existen en el universo. En otras palabras, sólo podemos percibir formas que son detectables con los cinco sentidos (al menos que hayamos desarrollado otros sentidos). Esto no significa que esas formas detectables por los seres humanos, formas físicas sean las únicas cosas que existen en el universo. Pensemos en el universo como un holograma. De cualquier manera, la idea de todo esto es saber que somos parte de un océano gigantesco de energía y que literalmente nada nos separa de nada. La única “separación” que percibimos es una ilusión causada por las limitaciones de los cinco sentidos. Literalmente somos Uno.

Somos un todo orgánico cuyas partes están cambiando todo el tiempo. Cada parte puede mirar a las otras partes y cada parte tiene su propio nivel de conciencia y conocimiento. Aún así, el todo actúa exactamente como el todo, mientras que las partes actúan como parte del todo con propiedades individuales y con propiedades del todo.

El Dr. J.S. Bell, un físico del CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear) en Suiza, encontró una prueba matemática en 1964 en la que mostraba que todas las partes “separadas” del universo están conectadas de una forma inmediata y cercana. Muchos experimentos muestran que las partículas separadas por el espacio y el tiempo saben de alguna manera lo que la otra está haciendo en el momento exacto en el que la otra partícula lo está haciendo. En otras palabras, no se comunican. La comunicación toma tiempo y requiere un mensaje. Esto es diferente. Saben sin tener que comunicarse. Actúan simultáneamente como si estuviesen íntimamente conectadas de alguna manera a través del espacio y el tiempo, de una manera tal que no son afectadas por la separación de espacio y tiempo entre ellas.

Otra cosa muy profunda que muestra la construcción matemática de Bell es que la acción de una partícula subatómica depende de algo que le está sucediendo en otro lugar a otra partícula subatómica. En otras palabras, todos los eventos subatómicos son efectos de otros y causas de otros tantos. ¡Esto pone bajo una luz completamente diferente la ley de causa y efecto, del karma y del cosechar lo que sembramos! Las leyes de causa y efecto, el karma, no es sólo espiritual sino que también es científico.

Todos los pensamientos del universo, individuales y colectivos causan que la energía se “configure” en la realidad física que experimentamos. Esto es así, pero hay una causa aún más fuerte. Esta es el ser; el estado del ser. Hay muchos estados del ser tales como ser feliz, ser rápido, ser rico, etc. Esta es la causa más fuerte, la Primera Causa de todo. Esto es así debido a que es la declaración del Espíritu, del uno mismo. A partir de un estado se generan pensamientos propios de ese estado.

Aquí hay otra forma de entender cómo es que todos somos uno: la Ciencia muestra que nosotros mismos y todas las cosas están hechas de energía e intercambian energía con todas las demás cosas, todo el tiempo y de una manera muy compleja. La energía es el bloque constructivo de toda la materia. La misma energía de la que está compuesta nuestra carne es la misma de la que están compuestos los ladrillos de nuestras casas y los árboles que están afuera. No hay “energía del árbol” y “energía del hombre”. Todo es la misma energía. La energía está constantemente fluyendo, cambiando de forma todo el tiempo. Esto es una explicación muy simplificada de una cosa bastante compleja.

A nivel cuántico, todo se parece a un gran plato de “sopa” de energía, un océano de energía que está siempre fluyendo, un océano que tiene diferentes concentraciones y esencias en varios puntos. Imaginemos un océano con una zona caliente, una zona turbulenta y así sucesivamente. (El océano representa la “sopa de energía” y las zonas representan los varios objetos físicos tales como un cuerpo ó un árbol).
La zona caliente intercambia moléculas con el resto del océano. La zona turbulenta también intercambia moléculas de agua con el resto del océano pero la esencia de esa zona caliente permanece caliente y la de la zona turbulenta permanece como tal. Hay intercambio y flujo a nivel molecular pero en un nivel más elevado las zonas permanecen calientes ó turbulentas a pesar de que las moléculas que la componían hace un momento ya se han ido y se han reemplazado por otras de otras regiones. Las moléculas en la zona caliente cambian pero la esencia de las características de esa zona permanece caliente. Las características de una región pueden permanecer iguales a pesar de que las partículas que forman esa región son siempre diferentes, entrando y saliendo de y hacia otras regiones. Esta es la manera en que somos a nivel cuántico, un gran campo de energía interconectada con localizaciones de características. Compartimos la misma energía con todo lo demás y no obstante, asumimos características únicas. Es una matriz muy compleja, una telaraña compleja.

Ahora pongámoslo un poquito más complicado. Imaginemos ahora que hay dos personas en una habitación. Ambas están deprimidas y tristes. Sus niveles de energía son bajos. Una de ellas cuenta un chiste y la otra se ríe. La persona que contó el chiste causa que la otra persona que se empezó a reír eleve su nivel de energía y se vuelva más vibrante. Esto causa que el que dijo el chiste también se ría porque hay una nueva alegría en el aire y están compartiendo un chiste. La persona A causó un cambio en la persona B y esto retornó para causar un cambio en A. ¿Has notado cómo te sientes bien después de que le cuentas chistes a mucha gente y mejor que si se lo contaras a una sola persona? Esa gente toma el chiste que contaste y se lo cuenta a otros amigos y éstos se lo cuentan a amigos de sus amigos y se desparrama. Bueno, el Universo es mucho más complicado que eso. Un cambio en una parte de ese gigantesco campo de energía se propaga y causa cambios en las partes próximas a él y éstas causan cambios en las zonas próximas a sí mismas y el efecto ¡se continúa para siempre! ¿Puedes imaginarte eso? ¡Nuestra sonrisa cambia la composición de todo el universo! Científicamente, el enojo también hace lo mismo.
Cualquier cosa que hacemos, cualquier pensamiento que tenemos, se propaga para siempre y cambia la composición de todo el universo sin importar que tan pequeño sea el cambio.

Ahora aquí va algo que es aún más interesante. Debido a que tú somos parte de ese universo, esa propagación, como un rizo, nos vuelve dándonos un toque de una esencia similar. Causamos un cambio en el campo de energía que nos rodea y éste se propaga tocando todo y por supuesto como reacción ¡todo vuelve a nosotros multiplicado! Esto es similar a lo que ocurre con los rizos que se forman como círculos en expansión cuando ponemos el dedo en un vaso con agua. Pero, en nuestro caso esas ondas siguen para siempre y también se chocan con otras localizaciones de energía, causan cambios en ellas, éstas reaccionan, por así decirlo, envían sus propias ondas y estas ondas rebotan hasta que llegan a nosotros, nos cambian y reaccionamos y esta increíble danza sigue para siempre. Esta es la forma en que, científicamente, funciona la ley de causa y efecto y lo hace de manera multiplicativa. Esto sucede a nivel de energía y a nivel espiritual. En ambos casos, el mejoramiento de un individuo en el sistema causa un mejoramiento de todo el sistema y un mejoramiento de todo el sistema causa un mejoramiento en el individuo. La inversa también es cierta.

Suponiendo que dejáramos constantes todas las demás cosas, un individuo y una sociedad lograrán tener riqueza y felicidad en la medida que entiendan de qué está hecho el universo y aprendan a controlar la creación.

Esa es nuestra breve introducción a la substancia de la cual estamos hechos.
La Física Cuántica muestra que el mundo no es la cosa dura e incambiable como aparenta ser. En lugar de ello, es un lugar muy fluido que se construye continuamente usando nuestros pensamientos individuales y colectivos y estados del ser como sociedad, país, familia, planeta, sistema solar o universo.

Hemos comenzado a destapar la ilusión. Sabemos de qué están hechas nuestras experiencias tridimensionales y hemos comenzado a examinar cómo es que las fabricamos.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Locura Divina

Creo que yo mismo me causé la enfermedad. En mi intento de penetrar en el otro mundo, encontré a sus guardianes, la encarnación de mi propia debilidad y de mis faltas. Al principio pensé que estos demonios eran habitantes inferiores del otro mundo, que podían jugar conmigo como una pelota, porque fui a estas regiones sin preparación y me perdí. Después pensé que eran partes desgajadas de mi propia mente (pasiones), que existían cerca de mí en su propio espacio y medraban a costa de mis sentimientos. Creía que todo el mundo también las tenía, pero que no las percibían, gracias al engaño protector y eficaz de la existencia personal. Pensaba que éste era un artificio de la memoria, de los complejos imaginados... un muñeco agradable de mirar desde fuera, pero con nada real en su interior.

En mi caso, mi ser personal se ha desarrollado con poros a causa de mi conciencia confusa. Con ella quería acercarme a las fuentes superiores de la vida. Me debería haber preparado para esto durante un largo periodo de tiempo, invocando dentro de mí un yo superior e impersonal, ya que el "néctar" no está hecho para los labios mortales. Éste actuó de manera destructiva sobre el yo humano-animal y lo dividió en pedazos. Desintegrados éstos poco a poco, el muñeco quedó realmente roto y el cuerpo dañado. Yo había forzado inoportunamente la "fuente de la vida", y la maldición de los dioses recayó sobre mí. Reconocí demasiado tarde que habían intervenido elementos tenebrosos. Tuve conocimiento de ellos cuando ya tenían demasiado poder. No había vuelta atrás posible. En ese momento había conseguido el mundo de los espíritus que quería conocer. Los demonios surgieron del abismo, como el guardián del Cerbero, negando el acceso a los no autorizados. Entonces decidí emprender una lucha a vida o muerte. En última instancia, esto significaba para mí la decisión de morir, puesto que había dejado de lado todo lo que sostenía al enemigo, pero que era también todo lo que sostenía la vida. Yo quería entrar en la muerte sin volverme loco y le planteé a la Esfinge: ¡o entras tú o entro yo en el abismo!

Entonces hizo aparición la claridad. Mediante el no-hacer penetré en la verdadera naturaleza de los que me seducían. Eran alcahuetes e impostores de mí "querido" yo personal que carecían totalmente de realidad. Y emergió un yo más amplio e inclusivo que me permitió abandonar mi anterior personalidad con todo lo que le rodeaba.
Vi, entonces, que con esa personalidad anterior nunca hubiera podido entrar en los reinos de la trascendencia. Como consecuencia, sentí un terrible dolor, como un golpe aniquilador, pero fui rescatado, y los demonios se fueron consumiendo, se desvanecieron y perecieron. Comenzó para mí una nueva vida y desde entonces me sentí diferente a como me había sentido durante toda mi vida. Un yo que estaba hecho de mentiras convencionales, imposturas, autoengaños, imágenes de recuerdos, un yo exactamente como el que había dirigido toda mi vida anterior creció de nuevo en mí, pero detrás y por encima de él se mantenía un yo más grande y englobante, que me imprimió con algo eterno, inmutable, inmortal, e inviolable, y que, desde entonces, ha sido mi protector y mi refugio. Creo que es bueno que muchas personas se familiaricen con este yo superior y que existan personas que han alcanzado de hecho esta meta por caminos menos dolorosos.

viernes, 11 de marzo de 2011

Fisica Cuantica: La Primera Clave para Encontrar Tu Camino es Saber de que estas Hecho Tu y el Mundo (1ra. Parte)

La Física Cuántica comienza a explicar cómo sucede todo en nuestro mundo.
Estamos capacitados para manipular directamente todo el mundo físico pero puede ser que no nos demos cuenta de ello. La falta de conciencia acerca de cómo la materia física se manifiesta y el papel que jugamos en este proceso, hace que la vida aparezca como un evento que está fuera de nuestro control. Nos puede parecer que somos víctimas de las circunstancias cuando en realidad somos nosotros la causa de esas circunstancias incluyendo el hecho de que podamos estar experimentando la abundancia o la carencia.

La Física Cuántica es el primer paso de un increíble despertar que estamos a punto de iniciar. No sólo nos permite entender de que está construido todo lo que nos rodea sino que también nos permite comprender cómo nuestras creencias y pensamientos crean la materia, cómo cosechamos lo que sembramos e incluso cómo es que “antes de que lo pidamos ya se nos ha concedido”. Esto es ¡por fin! La forma en que la ciencia se está poniendo al día con la espiritualidad y el sentido común ¡y al mismo tiempo los está explicando! Cuando alguien nos dice que cualquier cosa es posible con la condición de que creamos que es así, ¿No es acaso más probable que lo creamos si sabemos científicamente, paso a paso, cómo hacerlo y que como consecuencia de ello el universo cambie y produzca lo que estamos creyendo?

Uno de los beneficios de entender los conceptos básicos de la Física Cuántica es poder ver finalmente en forma clara, entre otras cosas, cómo funcionan nociones tan fuertes como la creencia y el pensamiento correcto. El ver y entender este conocimiento nos permite tener confianza total, eliminar dudas, crear la realidad consciente, bella y poderosamente y, de muchas maneras, volvernos más poderosos.

¿Qué es la Física Cuántica? Es el estudio de los bloques básicos en que está construido el Universo. Por ejemplo, el cuerpo está constituido por células. Las células a su vez, están hechas de moléculas las cuales están compuestas por átomos que a su vez están hechos de partículas subatómicas tales como los electrones. Este es el mundo de la Física Cuántica. Todo está hecho de “grandes grupos” de partículas subatómicas.
El cuerpo, un árbol, los pensamientos, un vehículo, un planeta, la luz y todo lo demás son “concentraciones” de energía. Todos ellos son grandes conjuntos de aproximadamente las mismas partículas subatómicas. La única diferencia está en la manera en que estas partículas se agrupan en bloques cada vez mayores. La clave para re-crearnos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea es saber cómo funcionan.
Para hablar correctamente, una partícula subatómica no es en realidad una partícula en el sentido en que un grano de arena lo es. Mientras que los átomos y grandes partículas son objetos, o cosas, las partículas subatómicas no son objetos de ese tipo. Son “probabilidades” de existencia y al mismo tiempo “existencias múltiples”. También son ondas y partículas al mismo tiempo.
La Física Cuántica se pregunta qué son estas partículas subatómicas y cómo actúan. Las partículas subatómicas son paquetes de energía también llamados quanta. Todo en el universo está hecho de energía y esos paquetes se comportan ¡de la manera más increíble! ¡Están bajo nuestras órdenes! La razón por la cual se podrían agrupar en forma de un barco de lujo, por ejemplo, está en nuestro pensamiento individual y colectivo. Hasta este punto es que hemos venido diseñando nuestra vida al azar e inconscientemente. Ahora vamos a despertar y vamos a hacerlo deliberada y conscientemente con una dirección.

Comencemos nuestro viaje por el campo cuántico… ¿De qué está hecho nuestro cuerpo? De tejidos y órganos. ¿De qué están hechos los tejidos y los órganos? De células. ¿De qué están hechas las células? De moléculas. ¿De qué están hechas las moléculas? De átomos. ¿De qué están hechos los átomos? De partículas subatómicas. ¿De qué están hechas las partículas subatómicas? ¿De energía? No. No están hechas de Energía; son energía. Somos un gran “trozo” de energía al igual que el resto de todas las cosas. El Espíritu y la Mente establecen esta energía en la forma física en la que estamos acostumbrados a verlas.

La Física Cuántica nos dice que el acto de observar un objeto causa que él mismo esté allí dónde y cuándo lo observamos. La Energía son las partículas subatómicas que a su vez constituyen los átomos y finalmente la materia. Esta energía existe como ondas esparcidas por el espacio y el tiempo. Solamente cuando se realiza una observación, las ondas se convierten en un evento localizado en el espacio tiempo, una partícula en un “tiempo” y un “lugar” específicos. En cuanto retiramos la observación, se convierte nuevamente en ondas. Por lo tanto, nuestra observación, nuestra atención a algo y nuestra intención, literalmente crea esa cosa como un evento en el espacio tiempo. Esto es científico.

Ningún objeto es sólido. Está hecho de paquetes de energía que destellan rápidamente. Billones y Trillones de paquetes de energía. Aparecen y desaparecen del espacio donde “está” el objeto. No se quedan en el lugar.
Entonces, ¿porqué un cuerpo humano o una casa parecen objetos sólidos y continuos cuando en realidad sabemos que son un campo de energía que destella rápidamente? Por ejemplo, una imagen de televisión. Cuando miramos una película y vemos una persona que pasa caminando suavemente, en realidad es un rollo de película que gira a 24 cuadros por segundo, cada uno levemente distinto del siguiente, de manera tal que los ojos no detectan la brecha entre los cuadros. Incluso cada uno de esos cuadros es una composición de billones de fotones destellando a la velocidad de la luz. Eso es lo que es nuestro mundo, un destello rápido que causa la ilusión de ser “sólido” y “continuo”. Una vez que entendemos de qué está hecho realmente el mundo, verdaderamente comenzamos a comprender su verdadero comportamiento y naturaleza. Es ahí cuando se cambia nuestra perspectiva de él. Con el cambio de percepción, cambiamos la creación del mundo y ese es el primer paso hacia el bienestar.

Todos los físicos están de acuerdo en una cosa: las partículas subatómicas, esos “paquetes” o cuantos, no son partículas en un punto específico del espacio y del tiempo, como lo son una mesa o una silla, sino que son una probabilidad de que existan en varios puntos del espacio y del tiempo. El acto de nuestra observación los convierte en una partícula “física” en un punto específico del espacio y del tiempo y una vez que retiramos la atención, se convierten nuevamente en probabilidad.
Imagina que la silla en la sala de estar de tu casa es una gran partícula subatómica. Esta sería la manera en que se comportaría: cuando no estás en casa y no estás pensando en la silla, ésta “desparecería” y se convertiría en la probabilidad de “reaparecer” en cualquier parte de la sala o, en realidad, en cualquier lugar del Universo. Cuando regresas a tu casa y piensas en sentarte en una silla ubicada en un lugar específico de la sala de estar y buscas una silla en ese lugar, ¡aparece mágicamente! Esto no es una historia de fantasía mágica. ¡Las partículas subatómicas se comportan de esta manera!
Lo asombroso es que toda la materia está compuesta puramente de cantidades enormes de estas partículas. Por lo tanto, toda la materia actúa exactamente como lo haría un gran grupo de partículas subatómicas. El hecho de que la silla “esté ahí” es el resultado de nuestra observación de que está ahí y decidiendo que esté ahí. No es una existencia totalmente independiente.

Ningún tipo de materia existe completamente independiente del observador. Como dicen algunos científicos, si todo el mundo y todo en el universo dejara de mirar a la luna o de pensar en ella, no sería más una luna física, sería una probabilidad de existencia. El acto de observación hace que la probabilidad se vuelva una cosa definida y convierte en nulas todas las otras posibilidades de estar en cualquier otro lugar del mismo mundo. La atención continua la mantiene de esa manera, produciendo la ilusión de una existencia sólida y continua de la luna física.
Los físicos también han descubierto que las “partículas” cuánticas toman decisiones. Están propulsadas por la inteligencia. No sólo eso, también saben, instantáneamente, qué decisiones han tomado las otras partículas ¡en cualquier parte del universo! Este sincronismo a través del espacio y del tiempo es instantáneo: se “comunican” sin mediar ningún tiempo ni atravesar ningún espacio. En efecto, también se mueven instantáneamente sin tener que atravesar el espacio ó tomar tiempo. Pueden ir desde al punto A al punto B sin tener que cruzar el espacio entre medio y los puntos A y B pueden estar en diferentes tiempos. Las “partículas” cuánticas no son partículas en el sentido que usualmente se le da a la palabra cuando uno piensa en una partícula. No son “cosas” que están en un “lugar” particular y en un “instante”, están esparcidas por el tiempo y el espacio.

Entonces, ¿Cual es la inteligencia que las propulsa? Bien, es la Mente de la Fuente, Todo lo que Es; constituida proporcionalmente de nuestra propia mente “individual” y así como también de las mentes ”individuales” del resto del universo, dependiendo del tema, materia, visión y fuerza de voluntad.
Piensa cuidadosamente sobre este tema. Piensa sobre el hecho de que todo lo que ven tus ojos está hecho de estas increíbles partículas que están bajo tu control. Piensa sobre los hechos científicos que prueban ahora que tú estás en la causa o causa compartida, para todo lo que te rodea, que nada de lo que observas puede existir sin tu observación. Todo lo que necesitas hacer es elegir lo que quieres observar, elegirlo con certeza y consistencia y esto causará que el campo de energía se materialice en esa cosa en el “tiempo”, dependiendo de tu claridad, enfoque y certeza. Los científicos han descubierto que aún en los más estrictos experimentos de doble aislamiento, sus expectativas todavía influían en los resultados, concluyendo que es imposible llevar a cabo un experimento donde haya influencia cero por parte del observador.

Los paquetes cuánticos o partículas se definen mejor como probabilidades de existencia. Por ejemplo, digamos que hay un paquete cuántico llamado Sr. X. Antes de que pidamos hablar con el señor X, no existe como persona. Existe como una persona potencial. El Sr. X está por todo el mundo al mismo tiempo, con el potencial variable de aparecer en persona en Moscú, Nueva York, Kabul, Tokio, Sídney, Ciudad del Cabo o cualquier otra ciudad en el mundo. Ahora bien, cuando le llamamos por su nombre, aparece donde se le llamó y la probabilidad de que aparezca en cualquier otra ciudad se vuelve cero. Después que terminamos de conversar con él, desaparece y deja de ser una persona localizada, se desparrama como una onda y la probabilidad de aparecer en cualquier parte del mundo toma lugar nuevamente. Esa es la forma en que se comportaría un paquete cuántico llamado Sr. X. Hay que tener en cuenta que todo en este universo está hecho de paquetes cuánticos.

Otra propiedad de los cuantos es que son multidimensionales. Por lo tanto en el ejemplo anterior, cuando el Sr. X es una probabilidad, es multidimensional. Cuando se localiza al llamarlo por su nombre, se convierte en una cosa en un mundo de cuatro dimensiones (nuestro mundo tal como lo conocemos es, en realidad, tetradimensional siendo sus dimensiones la longitud, el ancho, la altura y el tiempo). Esto es científico. Ahora podemos ver científicamente que nuestro universo es multidimensional a pesar de que nuestros sentidos solo sean capaces de detectar únicamente longitud, ancho, altura y tiempo como si fuesen las únicas dimensiones. No obstante, nuestras mentes son también multidimensionales. Escucha a tu alma, a tus sentimientos. El mundo físico está hecho literalmente de ideas y energía.

Si alguna vez sientes que no tienes poder considera esto: Einstein y otros científicos cuánticos han probado que toda la materia física está hecha de paquetes de energía que no tienen límite en el espacio y en el tiempo.
Este campo de energía no tiene límites bien definidos. El universo es literalmente nuestro cuerpo extendido sin límites de espacio ni tiempo. La ciencia ha probado también que la mente no tiene límites. Todas las mentes están “conectadas” a un solo campo mental. Somos más grandes y poderosos de lo que pensamos. Entonces, deja de sudar por las pequeñeces.

Ya lo tenemos todo. Se ha dicho que antes de que lo pidamos ya se nos ha concedido. La ciencia está comenzando a probar, a través de la física cuántica, que esto es científicamente verdadero. La infinita inteligencia y potencialidad a nivel cuántico, el nivel que constituye todo lo que nos rodea, y nuestra inherente habilidad de influir sobre este campo es lo que nos proporciona el “tenerlo todo”. Estamos comenzando a entender esto en una mayor escala tanto científica como espiritualmente.
Ya tenemos toda la riqueza más allá de los sueños más fantásticos. La tenemos. Puede ser que no la estemos viviendo en este momento pero la tenemos. Tener y experimentar son cosas distintas. Una forma fácil de explicarlo es que tenemos la capacidad de pilotar un avión, montar las olas o bucear pero puede ser que no hayamos experimentado este aspecto de nuestra habilidad. No hay nada que haya que hacer para tener esta habilidad; ya está dentro de nosotros. Ya se nos ha dado. Todo lo que necesitamos hacer es experimentar esta habilidad.

En nuestra vida, simplemente movemos la conciencia para experimentar aspectos de nosotros mismos que siempre hemos tenido e incluso algunos que ni siquiera imaginamos que existan. El campo cuántico puede formar una cantidad infinita de formas y experiencias a partir de eso. Aún más, ya lo ha hecho de esa manera. Las palabras que estás leyendo es sólo una de esas cosas, el próximo pensamiento que vas a tener es sólo una de esas cosas pero aún así nunca podrías haber pronosticado que estarías experimentando estas frases. Sin embargo, tu deseo de encontrarlas, ha causado que aparezcan en tu realidad. En verdad, siempre existieron. No necesitamos predecir exactamente cómo van a funcionar las cosas, todo lo que tienes que hacer es desear, tener la intención y saber que es posible y todo se arreglará para que te llegue.